Por qué la tecnología de Geodesic para el tratamiento y control del agua de Torres de Refrigeración o Condensadores Evaporativos ahorra agua

El control de la alcalinidad y la dureza permite ahorros de mas del 60% del agua de purga del sistema.

Generalmente, en los tratamientos de agua en las torres de refrigeración y condensadores evaporativos, estamos acostumbrados a manejar la conductividad como parámetro determinante en la decisión de purgar más o menos agua de los circuitos, para evitar el exceso de sales que puedan generar incrustaciones en cualquier parte de la instalación.

La realidad nos indica que la tendencia incrustante o corrosiva del agua la determina el índice de Saturación de Langelier, Índice que compara el ph del agua con el ph de saturación, (parámetro que nos indica el ph a la que esa agua estaría saturada de sales), de forma que, si el ph real es mayor que el ph de saturación el agua tiene tendencia incrustante, mayor cuanto mayor es esa diferencia y, será tanto más corrosiva, cuanto menor es el ph real respecto al ph de saturación.

Ahora bien, si analizamos la fórmula que determina el ph de saturación nos damos cuenta que el parámetro que mas influye es la alcalinidad del agua (carbonatos), seguido de la dureza (calcio) y, en menor medida, de la temperatura y de la conductividad. Por tanto, cuanto mayor sea la alcalinidad y la dureza, más incrustante será el agua y por tanto mas deberíamos purgar para bajar dichos parámetros y conseguir que el agua se encuentre en equilibrio.

Una de las consecuencias del uso de la tecnología de Geodesic es que se crea un ambiente muy alcalino en el entorno del cátodo del equipo de tratamiento, cuya consecuencia más inmediata es la precipitación de cal (carbonatos y calcio) en el mismo, que son retirados del sistema gracias a la solución automática de limpieza que llevan incorporados todos los equipos. Por tanto, el tratamiento retira del agua carbonatos y calcio lo que reduce la alcalinidad y la dureza cuya consecuencia inmediata es el aumento del ph de saturación y por lo tanto favorece el equilibrio del agua disminuyendo consecuentemente la purga.

La cantidad de agua ahorrada dependerá, en cada caso, de las condiciones del agua de aporte y de la operación de la torre, pero podemos afirmar que ahorramos mas de un 50% y, en algunos casos hasta el 80% del agua de purga. En el siguiente enlace hemos desarrollado una aplicación que permite calcular, de manera aproximada, el posible ahorro en una instalación: pincha aqui